Anónimo.

Todo empezó con aquel sábado que tanto esperé y que por fin llegó. Recuerdo que estaba nerviosa,ansiosa por verte,por tenerte entre mis brazos y para mi poseerte. Fueron mas de mil mensajes y noches pensando en ti, hasta que por fin llego el día que tanto había soñado. No me he olvidado de todos los momentos que pasamos juntos, porque cada día que pasa lo recuerdo mas y mas, porque todas las noches,antes de acostarme,cierro los ojos mientras escucho una de nuestras canciones y abrazo el peluche que me regalaste como si fueras tu. Pero al abrir los ojos vuelvo a la realidad. No puedo evitar sonreír cuando pienso en ti, ni en tu nombre, en tus manos, en tus abrazos,en tus besos. Desde que llegaste a mi vida, todo fue distinto, me sentía mas fuerte, invencible y le no temía a nada. Eres mi ultimo pensamiento cada noche y el primero de cada mañana y por eso consigues que muestre lo mejor de mis sonrisas día a día. No tengo suficiente tiempo para expresar todo lo que siento por ti, pero no dejo de soñar que nuestros caminos se vuelvan a juntar y poder revivir lo que era nuestro, y seguir pasando momentos inolvidables a tu lado, porque una vez dijimos siempre y yo sueño con seguir adelante con esa promesa, pero contigo.

Te echo de menos.